No cabe duda de que una de las causas de desigualdad más graves es la que proviene de los diversos fenómenos de violencia que sufren las mujeres por el hecho de serlo. Ello obliga a los Estados al diseño de políticas públicas eficaces tanto para la prevención, la protección y, desde luego, la investigación y, en su caso, el castigo de los responsables. En este contexto, la perspectiva de género adquiere un excepcional valor.
Como instrumento de interpretación orientada de las normas penales, para el abordaje serio, imparcial y eficaz de la investigación de los delitos de los que las mujeres son víctimas y par ...